Las vacaciones de verano han terminado, al menos para la mayoría de los estudiantes. Es hora de ponerse el uniforme y preparar la mochila: ¡hoy es la vuelta al cole! Pero, ¿qué hacen nuestros alumnos para volver a la escuela?
Los franceses en el extranjero
Algunos de estos jóvenes, concretamente uno de cada tres según cifras recientes, tienen laoportunidad de cursar su primer año en el extranjero. Es una práctica que se ha convertido en habitual entre los estudiantes que siguen cursos largos en escuelas de negocios, ingenierías o incluso universidades. En 2017, casi todas las escuelas incluyeron en su plan de estudios un periodo obligatorio en el extranjero para que sus alumnos pudieran obtener el título.
Del 33% de jóvenes que tienen la suerte de poder ir al extranjero, la mayoría (44%) se va de prácticas o de Erasmus para una estancia media de 6 meses. Otros optan por largas estancias, de un año o más, para completar su formación. El 25% restante prueba suerte en el mercado laboral extranjero. Quizás el comienzo de una gran carrera internacional.
Europa sigue siendo la favorita
Europa ha sido durante mucho tiempo el destino elegido por los estudiantes que van al extranjero a realizar prácticas. Entre los países preferidos por los estudiantes para realizar su Erasmus, prácticas o estudios, el Reino Unido ocupa el primer lugar, seguido de España y en último lugar del podio, Alemania, que acoge cada año a unos 4.218 estudiantes franceses. En los últimos años, Asia también ha cobrado protagonismo, con una serie de destinos emblemáticos como Singapur y Hong Kong.
Internacionalización
Hoy en día, es vital que todos los jóvenes adquieran experiencia en el extranjero para mejorar sus perspectivas profesionales. Por desgracia, no todos los jóvenes tienen las mismas ventajas. Algunas escuelas ofrecen apoyo completo para poner en marcha un proyecto internacional, pero la mayoría de las escuelas y universidades no tienen tiempo ni recursos para hacerlo. Existen soluciones de apoyo completas e innovadoras para ayudar a los estudiantes a estructurar su proyecto y a los centros escolares a gestionar este aspecto vital.
